¿Qué se espera de nosotros?

Terminan ustedes una importante etapa de sus vidas, en una época de cambios trascendentales para nuestro país y para el mundo.

Colombia busca hoy nuevos rumbos en su ordenamiento jurídico, político y económico, y el mundo se reorganiza también en comunidades y en bloques, dándose nuevas organizaciones que privilegien el desarrollo de los pueblos, conjuren el peligro de las guerras y tracen caminos firmes para la conquista de la paz.

Este es, a muy grandes rasgos, el contexto de nuestro país y del mundo, en el momento en que ustedes inician su vida profesional.

Es este el contexto que nos plantea retos y compromisos a quienes hemos tenido el privilegio de terminar una carrera, que ante todo ha de servirnos para nuestra superación personal y, sobre todo, para ponerla al servicio de los demás.

  • ¿Y qué es lo que nosotros profesionales podemos y debemos hacer en este nuestro país?
  • ¿Qué se espera de nosotros?
  • ¿Qué importancia tengo yo, como licenciado en Didáctica y Dificultades del Aprendizaje Escolar, o como tecnólogo en Administración de Empresas, de Personal o de Redes de Datos?

De todos y cada uno de nosotros espera mucho la patria, la sociedad y la familia.

Colombia necesita de muchos colombianos que, desde la idoneidad en el ejercicio de sus respectivas profesiones, aporten productividad, creatividad, calidad de su trabajo; en una palabra, que todos nos comprometamos con el desarrollo, con el progreso, con la búsqueda de nuevos destinos para nuestro país.

La sociedad espera de nosotros que seamos ciudadanos íntegros; que en todas y cada una de nuestras acciones dejemos la impronta de nuestra honestidad; que nuestro actuar esté enmarcado en la justicia; que cumplamos nuestros deberes a cabalidad y que seamos respetuosos de los derechos de los demás; que seamos en la sociedad constructores de una cultura de la vida, de lo positivo, de lo grande, de lo bello, en donde no sólo sea posible, sino estable y firme la convivencia civilizada.

En fin, sea cual fuere el papel que desempeñemos en nuestras familias, hijos, esposos, padres o madres, en ella tenemos que jugar un rol transcendental.

Hoy es imperioso trabajar y luchar mucho por la conservación de la familia, por la unidad en los hogares, por la recuperación y afianzamiento de todos aquellos valores que hacen de la familia, no sólo la célula fundamental de la sociedad, sino la comunidad en donde se clarifican, se privilegian y se dan bases sólidas a todos los valores que contribuyen a la realización de la persona humana.

Haciendo bien lo que nos corresponde hacer, en la familia, en la sociedad y en la patria, es como ustedes van a responder a los nuevos retos que a partir de hoy han de enfrentar como profesionales.

Tengan ustedes buena mar y buenos vientos; pongan a todas sus acciones el objetivo de hacerlo bien y cada vez mejor; busquen obrar siempre de tal modo que merezcan la aprobación y las felicitaciones de su propia conciencia, y así conquistarán su realidad personal y profesional, y harán el gran aporte que de ustedes esperan Colombia, la sociedad y la familia.

Llegue también a todos las luces de la Estrella de Belén e ilumine los senderos de sus vidas y, ante todo, llegue a sus corazones y en ellos sea acogida la invitación a ser Hombres de Buena Voluntad, porque siéndolo, será constructores de progreso, de cultura y de paz.

Antonio Mazo Mejía
Medellín, 13 de diciembre de 1991

Antonio Mazo Mejía - Fundador CEIPA
"Colombia necesita de muchos colombianos que, desde la idoneidad en el ejercicio de sus respectivas profesiones, aporten productividad, creatividad, calidad de su trabajo".
Antonio Mazo Mejía - Fundador CEIPA
Antonio Mazo Mejía
Fundador CEIPA